Las vacaciones de invierno son el momento ideal para planear un viaje a la cordillera y disfrutar de los encantos de la nieve. Para que nada empañe el viaje, siempre es bueno tomar precauciones para una conducción segura y un viaje lleno de buenos recuerdos.

Se recomienda llevar cadenas, pues Carabineros siempre exige el uso de éstas cuando se sube a los centros de esquí.

No sobrecargue el auto, ni menos, con más pasajeros para el cual ha sido diseñado. Es por ello que se recomienda ir en un vehículo SUV  en el caso de familias o grupos numerosos.

Controle que el porta esquí esté bien sujeto al vehículo, así como también los elementos que en él se transportan.

Antes de partir, asegúrese de llevar suficiente combustible. La revisión del estado de los frenos y el estado de los neumáticos es fundamental para pasar las exigentes pendientes y curvas que pueda tener el camino.

Cuidados en la conducción

Ingrese a las curvas a una velocidad prudente para que así no necesite frenar durante el desarrollo de ésta.

No salga de su pista y manténgase siempre a la derecha.

Tenga a mano un bidón de líquido refrigerante.

Al menor síntoma de apunamiento  por altura entregue de inmediato el volante a su copiloto y descienda a menos de 1500 metros para recuperarse. 

Para  destinos  muy superiores al nivel del mar, se recomienda siempre viajar con un segundo conductor.

No lleve calefacción al máximo, recuerde que el calor adormece.

Si va a pasar la noche en la montaña es indispensable el uso de anticongelante, ya que el motor del vehículo se enfría por las bajas temperaturas nocturnas de la cordillera.